Luego de la firma de los acuerdos de Argyle entre Venezuela y Guyana el 14 diciembre de 2023, muchos han sido los acontecimientos que han ocurrido y que lejos de reducir las tensiones como pretendía el instrumento suscrito en San Vicente y las Granadinas, parecieran que han ido escalando lenta y silenciosamente.

En enero, dando cumplimiento a parte de los compromisos asumidos en diciembre los cancilleres de Venezuela y Guyana se reunían en Brasilia con la intención de operativizar el diálogo binacional y activar la comisión mixta que abordará la disputa territorial, uno de los objetivos que se planteó la delegación venezolana fue a palabras del canciller Gil:

“evitar la intervención de potencias extranjeras en la controversia y la necesidad de examinar la posición y acciones de Guyana respecto al área marítima no delimitada para asegurar el respeto a las condiciones acordadas desde hace décadas entre nuestros países”.

Los comentarios en ese momento no eran ingenuos, a finales de 2023 un barco de guerra británico arribaba a Guyana aumentando las tensiones luego de los compromisos asumidos en San Vicente y Las Granadinas. La visita del buque solo inauguró un conjunto de acciones sistemáticas realizadas por la República Cooperativa donde buscaba a palabras del presidente guyanés “mejorar la seguridad” del país.

ESCALADA GUYANESA EN 2024

Y es que haciendo un recuento sucinto de las visitas realizadas por altos funcionarios estadounidenses o británicos a Guyana nos daremos cuenta de que existe una intención premedita y alevosa de enrarecer la relación bilateral, ya compleja por el diferendo territorial y la explotación petrolífera en aguas aún no delimitadas:

  • El 08 de enero de 2024, el subsecretario adjunto de Defensa para el Hemisferio Occidental, Daniel Erikson, mantuvo reuniones con representantes del gobierno guyanés, las Fuerzas Armadas (GDF por sus siglas en inglés) y la Comunidad del Caribe (CARICOM), en la capital del país.
  • El 04 de febrero de 2024, el asesor adjunto de seguridad nacional de Estados Unidos, Jon Finer, y el director sénior para el hemisferio occidental, Juan González, se reunieron con autoridades de Guyana para hablar sobre una mejoría en las capacidades de defensa del país sudamericano.
  • En el marco de la cumbre de la CARICOM, celebrada entre los días 28 y 29 de febrero de 2024, una delegación encabezada por la embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas Linda Thomas-Greenfield, visitó Georgetown. Entre los demás miembros de a delegación estaba el secretario adjunto de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian A. Nichols; la administradora adjunta de USAID para América Latina y el Caribe, Marcela Escobari; la coordinadora principal para la Cooperación Atlántica, embajadora Jessye Lapenn; y la vicesecretaria adjunta principal para Diplomacia Energética, Laura Lochman.
  • El 22 de marzo de 2024, el director de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA), William J. Burns, realizó una breve visita a Guyana y mantuvo conversaciones con el presidente Irfaan Ali y altos funcionarios de seguridad.
  • El Ex presidente Bill Clinton participó en el United Caribbean Forum, celebrado en Guyana donde se abordarían temas de inversión y energía. Dicha actividad se desarrolló entre los días 25 y 26 de marzo de 2024.
  • En entrevista con la BBC a principios de abril de 2024, el presidente Irfaan Alí comentaba, confirmando las intenciones de las visitas de funcionarios estadounidenses: 

“Nos hemos alineado con países y una región que está del lado de Guyana, la CARICOM como región ha emitido una declaración en apoyo a la soberanía de Guyana, Estados Unidos ha emitidos una declaración en apoyo a la soberanía de Guyana, el Reino Unido ha emitidos una declaración en apoyo a la soberanía de Guyana, Francia ha emitidos una declaración en apoyo a la soberanía de Guyana, Canadá. Estamos trabajando sobre la base de una coalición internacional que no permitirá que esta región se desestabilice por cualquier acción de Venezuela para invadir la integridad de nuestro territorio o nuestras fronteras”.

  • Entre el 08 y el 09 de mayo, la General de División Juliet Nethercot, Directora de Estrategia, Política y Planes del Comando Sur de los EE. UU se reunió con el Brigadier Omar Khan, Jefe de Estado Mayor de la Fuerza de Defensa de Guyana (GDF), para discutir la cooperación en materia de seguridad en curso y las iniciativas de asistencia en materia de seguridad para avanzar en las plataformas tecnológicas.
  • El pasado 09 de mayo, aviones estadounidenses sobrevolaron la capital guyanesa, Georgetonw F/A-18F Super Hornet, con el objeto de demostrar la estrecha cooperación militar y de otro tipo entre Guyana y Estados Unidos.

El recuento realizado no busca visibilizar una cronología de hechos demostrables, sino más bien servir de base argumental para las denuncias que el Estado venezolano viene realizando sobre la militarización de la zona en disputa, que incluiría la instalación de bases militares y de espionaje de la CIA y el Comando Sur de los Estados Unidos, sino más grave aún la posibilidad de que instigue un conflicto armado entre ambos países, a partir de una situación de bandera falsa que incluya cualquiera de las fuerzas armadas de los países.

En una denunciada realizada por el presidente Nicolás Maduro y en la que se profundizó en este espacio, el mandatario se refirió a que organismos de inteligencia venezolanos han detectado 12 bases secretas de la CIA y 14 bases del Comando Sur en territorio Esequibo, cuyo fin sería planificar acciones beligerantes contra Venezuela, especialmente agresiones contra la población de Tumeremo, localidad que fue designada como capital provisional de la Guayana Esequiba, y contra la población del sur y del oriente del país.

La denuncia no implica una novedad en la región, Estados Unidos posee una extensa red de bases militares en Latinoamérica —al menos 80 de sus 800 baes se concentran allí, siendo Centroamérica y el Caribe las de mayor densidad— que le permiten mantener un control en lo que consideran su zona de influencia.

En un contexto de clivaje internacional, en donde la disputa por la hegemonía global se hace mas evidente, esta táctica (colocación de bases) busca ejercer influencia y dominar los puntos clave de la región. Dentro de este marco, la potencial presencia militar no declarada en el Esequibo concuerda con una tendencia histórica de injerencia y dominación territorial.

ÚLTIMOS ANUNCIOS Y ACCIONES

Aviones de combate estadounidenses fueron vistos en los cielos de Guyana el 9 de mayo, según información proporcionada por la embajada de Estados Unidos en Georgetown, la misma se realizó con la aprobación y colaboración de la República Cooperativa.

Venezuela anunció el despliegue de “patrullas aéreas”, luego del anuncio de sobrevuelo de aeronaves estadounidenses sobre Georgetown, la capital de Guyana, que incluían aviones Sukhoi 30MK2, F-16 y K-8 para defender el espacio aéreo venezolano.

El ministro de defensa, Padrino López, informó que el Sistema de Defensa Aeroespacial Integral “permanece activado ante cualquier intento de violación del espacio geográfico venezolano”, incluyendo el disputado territorio del Esequibo, que -reiteró- es de Venezuela.

Justo después y quizá como respuesta a las acciones de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, el parlamento guyanés aprobó un Proyecto de Ley de Enmienda de la Aviación Civil de 2024, presentada por el ministro de obras públicas, Juan A. Edghill, con el apoyo total de la oposición, en una rara muestra de unidad en una Cámara que generalmente se opone vehementemente entre sí.

Entre los cambios a la ley está que las autoridades puedan interceptar aeronaves que vuelen ilegalmente sobre el territorio de Guyana y que existan «zonas de exclusión aérea» para restringir o prohibir que aeronaves de otros países sobrevuelen ciertas áreas.

Distintas autoridades del gobierno venezolano mantienen la denuncia, en distintos espacios regionales, multilaterales y en los medios de comunicación sobre la intención de Estados Unidos y Guyana de crear un conflicto militar en la frontera con Venezuela con el objeto de abrirle un nuevo frente a Venezuela y terminar de desestabilizar a la región latinoamericana y caribeña.

VENEZUELA EJERCE SU SOBERANÍA 

Siguiendo el claro mandato surgido del referéndum sobre el Esequibo en diciembre de 2023, y con la promulgación de la Ley en Defensa de la Guayana Esequiba, Venezuela ha emprendido un proceso ininterrumpido de afirmación de soberanía sobre el territorio en disputa, que ha continuado con firmeza durante el año 2024.

Este ejercicio de soberanía se ha manifestado no solo a través del sobrevuelo y patrullaje oceánico, que han asegurado la presencia estatal en la zona históricamente venezolanas y que fueron afectadas por la usurpación del imperialismo británico, sino también con la reciente inauguración de un puente provisional sobre el río Cuyuní.

Dicha estructura, construida por ingenieros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, fortalece la presencia venezolana en el margen oriental del río Cuyuní que une la carretera de Turumban con la isla de Anacoco, reafirmando así las intenciones soberanas del país.

Estas medidas son expresiones concretas de la defensa territorial y de la proyección marítima inherente, enviando un mensaje decisivo tanto a entidades estatales como a actores no estatales, incluyendo corporaciones energéticas internacionales, sobre la activa y legítima reivindicación de soberanía por parte de Venezuela.

Lejos de ser interpretadas como gestos de beligerancia, las acciones venezolanas deben comprenderse como una respuesta legítima y necesaria frente a la actitud ilegal de Guyana, que ha intentado negar los derechos históricos de Venezuela sobre el Esequibo ha ignorado el Acuerdo de Ginebra de 1966, único mecanismo reconocido para la resolución de esta disputa territorial.

Fuente: Misión Verdad